jueves, 25 de agosto de 2016

AUTOINSTRUCCIONES

Son mensajes o verbalizaciones cortas que nos podemos decir en cuanto detectamos que algo anómalo ocurre. Se trata de utilizar autoinstrucciones o automensajes racionales, positivos, lógicos y realistas.
Se utiliza con niños impulsivos, y en muchas patologías que pueden molestar.
Los niños suelen decir en voz alta lo que van a realizar o están realizando: "Ahora coloco los muñecos en fila y les explico lo que tienen que hacer, después los llevaré de paseo..". Conforme los niños se van haciendo mayores ese lenguaje lo van interiorizando y se formará el lenguaje interno o, lo que es lo mismo, el pensamiento.
Cuando somos adultos y ante situaciones diversas pero sobre todo ante tareas complejas, no automatizadas que requieren un aprendizaje o unas directrices para su ejecución (p. ej. aprender  a conducir, ante una dirección desconocida, elaboración de una receta....) utilizamos órdenes  o mensajes que son lo que llamaríamos autoinstrucciones.
Las autoinstrucciones, son, pues: PALABRAS, MENSAJES U ÓRDENES QUE NOS DAMOS A NOSOTROS MISMOS Y QUE GUÍAN NUESTRA ACTUACIÓN, INDICÁNDONOS LO QUE DEBEMOS HACER O SENTIR EN CADA MOMENTO.
El entrenamiento en autoinstrucciones hará que poco a poco quien nuestro propio comportamiento.
Por ejemplo, podemos utilizar frases como:
  • "Si otros pueden yo también voy a intentarlo"
  • "Poco a poco iré adquiriendo autocontrol"
  • "No tengo por qué  conseguir las cosas a la primera"
  • ¡Voy bien!
  • "Voy a poner todo mi empeño"
  • "Si quiero puedo"
  • "Porque sucedió una vez no tiene que suceder siempre"
  • "Antes no tenía recursos que me ayudaran, ahora dispongo de algunos"
  • "Lo voy a intentar, pero ahora sabiendo relajarme, sabiendo enfrentarme con unos recursos que antes no tenía"
  • "Voy a intentar con todas mis fuerzas resolverlo"
  • "Esto sólo requiere esfuerzo y a mi me sobra"
  • "Sin prisas pero sin pausas"
  • "No lo domino pero lo conseguiré"
  • "Puedo hacerlo, sólo tengo que intentarlo"
  • "Puedo hacerlo, sólo tengo que esforzarme un poco"
  • "Si me pongo nervioso no pasa nada, me relajo y ya está, ahora se como hacerlo y cuanto más lo practique mayor será mi dominio"Antes no tenía recursos que me ayudaran, ahora cuento con algunos"
  • "Hasta ahora lo he pasado mal pero ha llegado el momento de actuar, tengo a mi familia, a mis amigos, pero sobre todo voy a intentarlo por mi"
  • "Gracias a esto puedo aprender mecanismos que antes no disponía"
  • "No tengo que correr"
  • "No quiero continuar con el problema, voy a enfrentarme y a intentar resolverlo"
Las autoafirmaciones se obtienen a partir del análisis del problema, puntualmente, como resultado de la reflexión.

También se pueden utilizar las tarjetas y llevarlas encima con frases, y/o colgarlas en diversas zonas de la casa que estén visibles.
Se pueden utilizar también dibujos metafóricos o símbolos metafóricos.
Son colillas significativas, identificativas de nuestro problema, y aunque en principio no nos lo creamos, poco a poco las iremos interiorizando.
  • Las autoinstrucciones deben ser redactadas con nuestras propias palabras, de tal forma que nos resulten muy significativas y las convirtamos en algo personal y perteneciente a nuestro repertorio, de una forma totalmente interioridad, automática y adaptada a cada situación.
  • El método también se conoce como vacunación contra la tensión, ansiedad o estrés. Las investigaciones demuestran que las personas que experimentan ansiedad en diversas situaciones, se dicen a sí mismas pensamientos que son muy diferentes de las autoinstrucciones que emiten las personas que no experimentan ansiedad.
  • La técnica también ayuda a aprender a controlar la excitación fisiológica producida por diversos estados emocionales alterados (por ejemplo, sudación en manos, alteraciones cardiacas, mariposas y nudos estomacales, alteraciones de la respiración, escalofríos, temblores, etc.)
  • La vacunación con autoinstrucciones racionales modifica las autopercepciones de desesperanza y de incapacidad de tal forma que podamos enfrentarnos eficazmente a ciertas situaciones, además de aportarnos recursos aprendidos y autoconcepto de competencia o autoeficacia.
                                                                                                        Víctor Francisco Rams Maiques

jueves, 18 de agosto de 2016

"EL CINE Y LA PSICOLOGÍA" (Listado de películas de tema psicológico)

La psicología, como cualquier disciplina, tiene en el cine una basta base de datos de gran utilidad para ejemplificar multitud de fenómenos de relevancia para ella.
Todos tenemos películas preferidas, y algunos/as incluso tienen una película con la que se identifican, que consideran refleja sus sentimientos, sus formas de ver la vida, lo que ha pasado o cómo le gustaría que fuese el mundo. Por eso la película es un medio utilizado en terapia como metáfora. Los psicoterapeutas tenemos una especial preferencia por el uso de la metáfora, ya que su carácter no directivo y casi poético, incita a pensar al destinatario y le lleva a realizar un esfuerzo de comprensión que no le deja indiferente y que le obliga a posicionarse. 
A lo largo de todos estos años de profesión, hemos una serie de películas que poco a poco han ido constituyendo un listado que presentamos a continuación y que clasificamos por temas, los cuales, resaltamos entre paréntesis, al lado de cada título. Es un listado vivo, pues cada día van estrenándose nuevas películas que a la vez constituyen una proyección de la realidad cultural y social cambiante. Por eso mismo se trata de un listado que iremos ampliando en la medida de lo posible.

                                                                                                 Víctor Francisco Rams Maiques

jueves, 7 de julio de 2016

EL VALOR POSITIVO DE LA EMPATÍA (EL AMOR A LOS DEMÁS)

¿Sabes escuchar?. ¿Tienes capacidad de ponerte en la piel del otro?.¿A veces puedes intuir lo que está sintiendo otra persona?. ¿Puedes intuir lo que otra persona está sintiendo a partir de su lenguaje no verbal?. ¿Prestas atención a los demás?. ¿Te defines como una persona con un grado de comprensión hacia los demás?. ¿Te consideras una persona solidaria?......
La empatía es la capacidad que se manifiesta con la respuesta sinceramente afirmativa a cada una de estas preguntas. Es la capacidad de ponerse en el lugar del otro. Es lo opuesto de la antipatía ya que el contacto con la otra persona genera placer, alegría y satisfacción. La empatía es la capacidad para ponerse en el lugar del otro y saber lo que siente o incluso lo que puede estar pensando. Quien se preocupa por vivir con empatía, cultiva simultáneamente entre otros: confianza, amistad, comprensión, generosidad, respeto y comunicación.
Si se carece de empatía, siempre se estará expuesto a fracasar rotundamente en las relaciones interpersonales, por eso es un valor fundamental en las relaciones de la pareja, es un valor que nos hace ser más solidarios y tolerantes, y por eso, es un valor que se debe aprender desde la infancia.
La empatía es una pieza fundamental que nos enriquece y nos identifica mejor como seres humanos.

Piensa, sincérate y reflexiona sobre la respuesta que des a cada una de las siguientes preguntas, y tu mismo@ te darás cuenta si en realidad eres o no "una persona empática"
  • ¿Cuando estás al lado de una persona le sueles prestar atención incondicional?
  • ¿Aunque a ti no te moleste un determinado comentario o broma, eres consciente de que a otra persona sí que puede molestarle?
  • Sueles observar con detalle a los demás mientras hablas con ellos?
  • ¿Sientes compasión por el dolor emocional de los demás?
  • ¿Tienes la sensación, a veces, de ver más allá de las palabras?
  • ¿Te gusta escuchar a las personas?
  • ¿Crees que tienes capacidad para saber cómo le está afectando a la otra persona lo que estamos diciendo o haciendo?
  • ¿Sabes cuándo un tema de conversación le molesta o incomoda a otros?
  • ¿Alguna vez has tenido la sensación de adivinar lo que otro va a decir antes de que termine de decirlo?
  • ¿Crees que tienes capacidad para darte cuenta de engaños y manipulaciones, o saber cuándo alguien nos quiere seducir o juega con nosotros?
  • ¿Sueles estar atento al lenguaje corporal de los demás
  • ¿Sueles interpretar correctamente las informaciones que te aporta la gente?
  • ¿A veces has llegado a percibir sentimientos en otra persona de los cuales la misma no era consciente?
  • ¿Toleras a las personas limitadas por la estupidez?
  • ¿Qué crees que debes hacer para ser, a partir de ahora, más empático?
  • ¿Recuerdas haber motivado a alguna persona que estaba atravesando por un mal momento?
  • Procuras sonreír siempre?
  • ¿Sueles hacer juicios prematuros de las personas?
  • ¿Cuando no tienes tiempo o es un mal momento, crees que lo expresas con cortesía y delicadeza?
      Víctor Francisco Rams Maiques


viernes, 1 de julio de 2016

AMARSE A SI MISMO

Dice un proverbio hindú que "Sólo poseemos aquello que no podemos perder en un naufragio", y es que lo último que podemos perder es el "ser originario" que nace y muere con nosotros. En este sentido, el sentimiento de amor a sí mismo no admite grados, se reconoce o no se reconoce, se siente o no se siente.
Pero este amor incondicional a nosotros mismos, no está exento de pensamientos, palabras, actitudes y comportamientos que nos profesamos a nosotros mismos. Así, amarnos es sinónimo de escucharnos, atendernos, aceptarnos, respetarnos, valorarnos, y, en definitiva ser amables con nosotros mismos. Sin este autoamor, no podemos amar al otro y ser merecedor del amor de los demás, del aprecio de alguien, de ser tratad@con respeto y dignidad. Amarse a sí mismo es no permitir el maltrato, la indiferencia o la crueldad hacia uno mismo. Amarse a sí mismo es ser asertivo: poner límites a la gente. Además amarse a sí mismo, implica también la responsabilidad de cuidarse a sí mismo, proporcionarse los bienes necesarios para la propia subsistencia y bienestar, así como protegerse de los males y peligros para la salud.
Las siguientes preguntas no tienen en conjunto la capacidad de un test donde poder valorar objetivamente los resultados de la contestación. En realidad, constituyen una serie de preguntas para ser contestadas en silencio y estimular, así, la reflexión sobre la forma de amarnos a nosotros mismos. Son una herramienta para poder activar la percepción de la forma, deficitaria o no, que tenemos  de amarnos a nosotros mismos
  • ¿Crees que dedicas el suficiente tiempo, energía, dinero.... en cuidarte y regalarte?.
  • ¿Cuidas tu salud?.
  • ¿Recuerdas haber hecho algo últimamente que pueda relacionarse o ser como una prueba de respeto hacia tu persona?
  • Cuál ha sido la última vez que te has autodespreciado utilizando el insulto u otras formas desvalorativas?
  • ¿Puedes autoaceptarte y quererte de una forma incondicional, o por el contrario lo supeditas a tus éxitos, logros, valías, etc.?
  • ¿Celebras tus logros significativos al pensar en lo que te ha costado conseguirlos?
  • ¿Has hecho algo últimamente para conocerte y comprenderte un poco más?
  • ¿Cómo reaccionas cuando percibes alguna prueba de indiferencia hacia tu persona por parte de los demás?
  • ¿Qué le dirías a una persona que manifiesta signos claros de autodesprecio?
  • ¿Cómo reaccionas a la crítica?. Recuerda un hecho y observa la reacción que tuviste, qué pensaste, qué sentiste...
  • Di las dos cualidades que más aprecias de ti mismo
  • ¿Cómo reaccionas o crees reaccionar frente al insulto de los demás?. Recuerda tres hechos a lo largo de tu vida en donde se te ha insultado o despreciado.
  • En tu infancia, ¿Cómo te elogiaban y/o criticaban?., ¿Con qué palabras?, ¿Qué mensajes no verbales de reconocimiento te fueron transmitiendo?.
  • ¿Hay alguien en tu vida (pareja, jefe, amig@...) que te conceda el mismo tipo de reconocimiento, ya sea positivo o negativo, que te dieron tus padres?.

viernes, 17 de junio de 2016

EL YO PENSANTE Y EL YO OBSERVADOR (LA FUSIÓN CON NUESTROS AUTOMATISMO MENTALES)

Cuando digo: "Soy tonto", lo digo mal. En realidad debería decir: "Pienso que soy tonto", pues a lo mejor "no lo soy o sí que lo soy", pero lo cierto es que no son más que pensamientos con los que interpretamos la realidad. El problema es que nos creemos que esa realidad es lo que pensamos o lo que sentimos. A esta situación la llamamos "Fusión". Cuando una persona se cree totalmente y se identifica totalmente  con los contenidos de su mente, se "fusiona" con ellos. En esta situación no distinguimos lo que vemos de lo que nos cuenta nuestra mente acerca de lo que vemos, como si fuera igual de válido.
De esta manera, nos convertimos en prisioneros de las reglas generadas por nuestra mente, por "debes" y "tienes" rígidos, por reglas que hacen que sigamos ciegamente las instrucciones socialmente transmitidas.
Somos prisioneros de las reglas generadas por nuestro medio cultural (que nos dicta lo que está "bien" y lo que está "mal" e introyectadas en nuestra mente en el proceso de domesticación que ha supuesto nuestro aprendizaje social e interrelacional. 
La fusión, pues, se refiere a la tendencia a que las personas parecen vivir exclusivamente en sus mentes, siendo insensibles a los sucesos que experimentan. A partir de esta fusión cognitiva, la conducta humana es más guiada por redes verbales inflexibles que por el contacto con las contingencias ambientales.
Podemos decir, pues, que tenemos dos mentes en dos los: el que piensa y siente, y el que observa lo que piensas. Diríamos que una parte de ti o de tu mente genera pensamientos, y otra los observa y reacciona o no ante ellos. No puedes controlar a tu "yo pensante", pero sí al "yo observador".
Por eso, cuando digo : "Soy tonto", lo primero que debo hacer es reconocerla como un pensamiento que ha generado tu mente, de este modo te separas de ellas, te "de-fusionas" y así no te fusionarás con tu experiencia interna, la podrás ver desde fuera y ser consciente de que es únicamente un pensamiento, que no tiene por qué ser cierto y no tiene por qué tener tanto poder sobre ti.