martes, 2 de julio de 2013

TERAPIA COGNITIVO-CONDUCTUAL



                     TERAPIA COGNITIVO-CONDUCTUAL

La industria farmacéutica ha acumulado demasiado poder e influencia a la hora de determinar qué es lo que puede considerarse enfermedad mental y cómo tratarla. En este sentido y condicionada por los intereses de esta industria se ha ido desarrollando la idea de "cerebro enfermo" a la hora de considerar cualquier tipo de enfermedad mental, explicando los trastornos mentales únicamente como un desequilibrio químico cerebral. De esta manera se intenta justificar la utilización del psicofármaco como único medio de tratamiento eficaz. Sin embargo la comunidad científica ha ido uniéndose en un conjunto de voces críticas al amparo de cientos de investigadores que evidencian que los psicofármacos no funcionan tan bien como se ha hecho creer, e incluso, es más, pueden resultar muy perjudiciales.

Teniendo en cuenta la evidencia científica de los últimos años, la terapia psicológica y específicamente, la terapia cognitivo-conductual, ha demostrado ser una alternativa más eficaz y económica que los fármacos para el tratamiento de la ansiedad y de la depresión y, a diferencia del tratamiento farmacológico, no supone ningún riesgo para la salud y no presenta ningún efecto secundario adverso.
El imperio farmacológico se está demostrando como una barrera para la salud de miles de pacientes.

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